Este año 2018 nos ha traído mucho en el mundo de la cerveza artesanal guatemalteca, en retrospectiva hemos crecido mucho pero aún estamos empezando, este año ya son 11 cervecerías artesanales en el haber nacional y se desde ya puedo decirles que unas más nacerán en los próximos meses, pero eso ya será un acontecer del 2019. Por mi lado puedo decirles que aprendí mucho y quiero seguir aprendiendo y compartiendo ese conocimiento con ustedes para que cada vez más y más gente disfrute de la chela artesanal, quiero dejarles con este pensamiento “No hay persona que pueda decir que no le gusta la cerveza, solamente no ha encontrado la indicada”. Para la última reseña del año quiero platicarles de la WC-IPA de Xamán, una chela que tienen que probar, me adelanto en el veredicto antes de describirles esta cerveza, creo que si no han probado una #IPA esta es -LA- ipa para probar de primero.
Empezamos como siempre por el aroma, se siente super limpio, los toques de lúpulo son inconfundibles y puros, no hay otro aroma que los esconda, si querés aislar el “toque” lupulado para meterlo en tu repertorio sensorial ésta chela es la respuesta. Luego vamos por el color, el color es una de las cosas que, en lo personal, más me enamora de una chela y esta tiene un increíble color dorado transparente que deja ver las burbujas y casi puedo sentir en la boca lo refrescante será.
Al primer sorbo puedo decirles que esta es una chela de cuerpo super ligero, ideal para ser una “afternoon driver” y tomarla toditita la tarde, a veces hay chelas que son de cuerpos tan intensos que un par son suficientes pero la WCIPA es una chela que puedes tomar botella tras botella, cuerpo super “crisp”. El lúpulo predomina en su sabor ya que sus maltas son maltas bases lo que deja que el lúpulo tome protagonismo, no se cuantos IBU tiene pero puedo comparar el sentimiento con el chile ¿Cómo así? el chile tiene un sabor muy peculiar y a eso se le añade lo picante, entonces pensalo así, un chile pica mucho o poco, una chela lupulosa super amarga o no tan amarga, esta es una chela lupulosa no tan amarga, deja sentir el “spice” del lúpulo sin sentirse obscenamente amarga.